Se conocieron las ventas de combustibles al público del mes de agosto

Finalmente y con bastante dilación respecto del informe de ventas totales de combustibles por todos los canales de comercialización en conjunto, se conocieron los datos que interesan a las estaciones de servicio, cuales son las ventas al público.

La disminución en términos interanuales fue algo menor que en el mes anterior, ubicándose en el 26,52%, contra el 28,27% del mes anterior. Así las ventas parecen haber llegado a un amesetamiento, del que le cuesta salir. Dadas las diversas circunstancia que rodean al mercado, es posible que la recuperación a partir de ahora sea más lenta, hasta llegar a la “nueva realidad”, la que no sabemos en qué nivel se establecerá.

La caída de ventas sigue siendo más pronunciada en YPF con respecto al mismo mes del año anterior. Shell y Axion están muy parejas en las variaciones y las restantes se ubican en una franja menos afectada.

YPF continúa detentando más del 50% de las ventas, tomando el total de productos, aunque con una pequeña disminución de su porcentaje respecto del mes anterior.

La siguiente es la variación de la participación en el mercado respecto del mes anterior

Con respecto a la variación de ventas por producto, es notable la menor caída en el gasoil grado 2, aunque es posible que esto no esté reflejando fielmente la situación en canal de ventas al público. Efectivamente, las variaciones en los precios son diferentes en las estaciones de servicio que en el sector mayorista. Estos últimos están algo más “liberados” y suelen subir bastante antes que en las estaciones, generándose algún corrimiento de ventas a estas últimas desde los distribuidores.

De ser así, la caída total de las ventas genuinas al público sería mayor que la reflejada por las cifras oficiales y nos estaría mostrando una situación peor en la mayoría de las estaciones de servicio.

Es así que la caída de ventas por tipo de combustibles nos muestra una diferencia notable entre naftas y gasóleos.

De una u otra manera, los números siguen siendo preocupantes para los expendedores de combustibles, los que se encuentran aún en situación comprometida y futuro bastante incierto.