Por el precio de los combustibles creció 18% la cantidad de vehículos con GNC
El incremento interanual se registró en los primeros seis meses del año. Las reiteradas subas en el precio de los combustibles son la principal razón. En el acumulado la cifra superó las 72.900 conversiones.
Los aumentos en el precio de los combustibles líquidos que marcaron el 2018 continuaron el mismo sendero durante el 2019. Además de tener un efecto inmediato en el consumo de combustibles de menor calidad, también logró que los usuarios vuelvan a confiar en el Gas Natural Comprimido (GNC) como una oferta más económica y ecológica.
Durante los primeros seis meses del año las conversiones llegaron a 72.907 a nivel nacional, si se lo compara con los 60.029 que se registraron en la primera mitad del 2018, se evidencia un incremento del 17,67% interanual. Vale remarcar que junio aún no terminó y el número podría variar en los próximos días.
“Los aumentos paulatinos de los combustibles líquidos, arrastrados por la inflación y otras variables, siempre son superiores a las del GNC. Cuando las naftas aumentan 2 o 3 pesos, el GNC sube 50 centavos o 1 peso. Esto llevó a que la gente se decidiera a hacer la conversión en lugar de esperar. El 2018 fue un año bastante pleno en el promedio anual y el 2019 lo está manteniendo”, explicó el vicepresidente de la Cámara de Expendedores de GNC (CEGNC), Pedro González, en diálogo con “Energía On”.
En números
$2 por kilómetro es el ahorro estimado que tiene un vehículo que funciona con GNC según la cámara de estacioneros.
A partir del 2010 el número de conversiones comenzó a escalar año a año y en el 2014 alcanzó el valor más alto con un total de 236.978. Sin embargo, en 2016, con la actualización de precios que impulsó la administración del presidente Mauricio Macri la tendencia se frenó a partir de la segunda mitad de ese año y se mantuvo durante todo el 2017. Ese año cerró con 93.469 conversiones, pero por los repetidos aumentos de las naftas los usuarios volvieron a refugiarse en el GNC.
En el 2018 se registró un total de 141,875 y la tendencia en alza se mantuvo desde entonces. Después de mayo la media nacional no bajó de la línea de los 10.000, ni siquiera durante los meses de verano que es cuando hay menor demanda.
Particularmente Río Negro y Neuquén no son las provincias que marcan la diferencia, sin embargo, mantienen un sendero de conversiones sostenido que se alinea a las tendencias nacionales.
La cantidad de conversiones que se registraron en mayo fue el mes más alto del año.
En lo que va del año, Río Negro acumula 193 conversiones que representa un incremento interanual del 12,95%. En paralelo Neuquén llegó 137 en los primeros seis meses del año, significa un alza del 21,16%.
El top tres de los sectores que realmente mueven la aguja a nivel nacional son Capital Federal, Córdoba y Santa Fe. De las 10.505 conversiones que van en junio, 8.058 son de allí. Las que menos aportan a la medida nacional son Chaco, Formosa, Misiones y Santa Cruz que en junio solo sumaron 8.
En números
72.907 es el número total de vehículos nuevos con GNC que acumulan los primeros seis meses del 2019.
“Las zonas de Río Negro y Neuquén están un poco castigadas con lo que respecta al GNC, al tener la exención del Impuesto a la Transferencia de Combustibles, tienen las naftas más baratas entonces no tienen una diferencia tan pronunciada entre el precio de los combustibles líquidos y el GNC como nosotros en Capital Federal”, expresó González.
En Neuquén el costo promedio del GNC ronda en los $19,50 y en Río Negro está cerca de los $21. En Capital Federal los precios varían entre $17,29 hasta casi $20. La mayor competencia de expendedores que hay a diferencia de las provincias de la región logra que los precios sean más competitivos.
En paralelo, los combustibles de primera línea en Capital Federal superan los $50 y en algunos lugares el precio es mayor a $52. En Neuquén, el valor de los combustibles de más calidad ronda entre los $41 y en los sectores más caros el costo se aproxima a los $42. En Río Negro la base también es de $41, pero en algunas localidades el tope supera los $43,60.
Queda claro porque es Capital Federal quién lidera el ranking de los sectores que mayores conversiones registran. La diferencia entre un litro de combustible de primera línea y un metro cúbico de gas supera los $34, mientras que en la región la diferencia es de $20.
“En Río Negro y Neuquén la nafta premium no supera los 44 pesos y el GNC está cerca de los 20 pesos. Ya estamos hablando de menos de la mitad de lo que cuesta un litro de combustible premium. Por esto creo que la tendencia que estamos viendo durante este año se va a mantener los próximos meses. Incluso creo que se puede ver un crecimiento en las conversiones en las zonas del sur”, proyectó González.
Las conversiones en Neuquén y Río Negro son menores porque el precio entre el gas y las naftas no es tan pronunciado”.
Si se comparan los últimos aumentos de ambos combustibles a nivel porcentual los valores son similares, pero en valores finales siempre el incremento de los líquidos es superior.
“Si hoy tenemos un aumento del 10% para ambos combustibles, en el gas el impacto significa 2 pesos en el costo total. En los líquidos, en Capital, el aumento sería de 5 pesos y en la región patagónica es de 4 pesos. Si bien no todas las provincias tienen los mismos precios, el gas nunca va a alcanzar el precio de las naftas”, cerró González.
La rentabilidad está por debajo del 10% en las estaciones de gas comprimido
Una característica particular que tienen los estacioneros que solo comercializan GNC es el elevado costo de energía eléctrica. A diferencia de las que solo venden combustibles líquidos, las de gas deben comprimir el hidrocarburo y las compresoras tienen un alto consumo.
“En mi estación de servicio de acá en Capital Federal, pago 250.000 pesos de energía eléctrica. Cosa que una estación de líquidos ni cerca. Y es que ellos no tienen que comprimir, van a los tanques que están enterrados. Ese componente es muy importante en el costo final del gas porque aumentó mucho en el último tiempo”, subrayó Pedro González.
Además de los sueldos y los costos de mantenimiento, el dólar es un factor que afecta directamente en la ecuación porque el gas se comercializa por millón de BTU que cotiza en la moneda extranjera.
“Si bien los costos son muy variables, porque depende de la estructura de la estación, los rubros básicos que son la materia prima, la energía eléctrica y los empleados, representan como mínimo un costo de 15 pesos por metro cúbico vendido”, detalló González.
El costo actual de la energía eléctrica representa un aproximado de 2 pesos por metro cúbico.
“Si vendo el gas 20 pesos me quedan 5 pesos y si a eso le saco el IVA me quedan 3 pesos con algunos centavos. Y si le saco otros gastos de mantenimiento en el mejor escenario por ahí tengo un 10% de rentabilidad”, indicó.
Si bien no hay una regla general, se estima que una estación que vende menos de 60.000 metros cúbicos por mes no es rentable, excepto que sea dual. Para que tenga una buena rentabilidad debe superar los 120.000 mensuales.
Fuente: rionegro.com.ar
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