Desde hace años, cada vez que se anuncia un aumento de los combustibles hay una postal que se repite: largas colas de automóviles esperando para cargar nafta y ahorrarse unos pesos; pero esto que podría ser normal, se convierte en anormal cuando las colas de vehículos obstruyen el tránsito, ignoran los semáforos o directamente cortan parcialmente el tránsito en la calle transversal. Por distintos motivos esto se da, en distintos puntos del país, en las estaciones de servicio del Automóvil Club Argentino, ante el lógico enojo de quienes no van a cargar nafta y simplemente pretenden desplazarse por la calzada.
En la ciudad de Resistencia, provincia del Chaco, una jueza tomó cartas en el asunto: la Jueza de Faltas, Marcela Cortés, decidió el arresto o multa por congestionamiento de vehículos para cargar nafta en el ACA de Italia y 9 de Julio.
El subsecretario de Seguridad Vial de la provincia señaló, en Ciudad TV, que se deben buscar alternativas, pero el conductor debe evitar el inconveniente. “Hay que analizar el derecho de todas las personas a circular”, dijo. También habló sobre los operativos para controlar el respeto a los semáforos, ya que en el primer mes la cantidad de multas aumentaron un 400%.
Domecq estimó que “la doctora seguramente habrá observado el inconveniente permanente que se da en esa cuadra. Es una avenida angosta que además tiene estacionamiento sobre su lado derecho. El espacio se reduce un 40% y si agregamos un automóvil con baliza, genera un entorpecimiento u obstrucción absolutamente innecesaria, que viola la normativa”.
Pidió tener en cuenta que la postura del conductor que frena en doble fila y pone baliza para entrar a la estación de servicio, “no es la conducta de alguien distraído que está buscando una dirección”; y que es una “situación compleja para el tránsito. Ella – la jueza – tiene sus fundamentos”.
Consideró que quizás la cosa sería distinta si no hubiera Estacionamiento Medido junto al cordón en esa cuadra, “pero hay que analizar el derecho de todas las personas, porque si no, estaríamos dando una especie de playa de estacionamiento para una estación de servicio y las demás podrían reclamar”.
Reiteró que “la conducta está cuestionada por la normativa por entorpecimiento del tránsito. Cada estación de servicio tiene su capacidad y es la que puede soportar en cuanto a cantidad de vehículos en una cola de espera. No podemos hacer esta actividad – cola para cargar combustible – en detrimento de cualquier otro usuario de la vía pública”; y luego mencionó la posibilidad de un caso de emergencia, donde se necesita pasar trasladando una persona enferma.
“Podemos ser solidarios y respetuosas, asumiendo conductas adecuadas. Todos tenemos derechos, y debemos actuar en ese marco en la vía pública”, acotó el funcionario. Agregando que “también lo tenemos en las escuelas, donde se hacen cosas con la Policía y el municipio”.
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