El precio del petróleo: ¿nueva tormenta para los emergentes?
La suba en el precio del petróleo podría convertirse en una nueva “tormenta” para los llamados “mercados emergentes”, que vienen enfrentando una fuerte presión por el aumento de tasas de interés en Estados Unidos y el encarecimiento del financiamiento. Nicolás Tereschuk*
El diario “The Wall Street Journal” advirtió puntualmente que “después de un verano [en el hemisferio norte] turbulento, los mercados emergentes enfrentan otra amenaza: el petróleo a 80 dólares” el barril.
El crudo se vende en dólares, una moneda que se está apreciando, y ahora el fluido llega a su precio más alto en cuatro años.
La cuenta que hace el especializado estadounidense es bastante simple: la cotización del crudo Brent subió en lo que va del 2018 alrededor del 22%.
Pero ese costo se duplica si quien importa petróleo lo hace en liras turcas, sube un 39% cuando quien busca comprar lo hace en rupias indias y un 34% en rupias indonesas; de más está decir que el peso argentino es la moneda que más se devaluó este año.
Por eso, los países del sur están empezando a tomar medidas: la India analiza limitar temporariamente las importaciones de petróleo, mientras que Brasil y Malasia introdujeron subsidios a los combustibles.
Lo mismo hizo Indonesia, el país más grande del Sudeste Asiático, aumentando el subsidio al diesel y a sus importaciones de nafta.
En tanto, Filipinas comenzó a permitir la venta en estaciones de servicio de combustibles de más baja calidad, como una forma de combatir la inflación.
En ese contexto, actúan al mismo tiempo los bancos centrales mediante subas de tasas de interés porque la inflación amenaza con dispararse.
Los precios de las naftas tocaron niveles récord históricos en Sudáfrica pocos días atrás.
A las tensiones por la “guerra comercial” entre Estados Unidos y China se suma así otro efecto del elefante en un bazar en el que parece haberse convertido la administración de Donald Trump.
Es que la suba en el precio del crudo surge a partir de una preocupación por una posible caída de la producción por las sanciones que la Casa Blanca aplicó a Irán.
Entonces los analistas ven al fluido dirigirse otra vez a las marcas cercanas a 100 dólares: la semana pasada, Bank of America Merrill Lynch predijo que la cotización estará en 95 dólares a mediados del año próximo.
Como lo recordó el Wall Street Jorunal, pesos pesados de los mercados emergentes, como Turquía, India y Sudáfrica, importan casi todo el petróleo que utilizan.
Si su déficit en cuenta corriente aumenta, eso presiona sobre la inflación y sobre las monedas de esos países, ya golpeadas durante el año que ingresa en su fase final.
La agencia Reuters señaló que los analistas ya advierten por “la combinación inflacionaria de precios más altos del petróleo y monedas que se debilitan” en países clave de Asia, con lo que podría generarse “una desaceleración del crecimiento económico global”.
Claro que esa situación también puede derivar en menos demanda de crudo por parte de esos países, lo que podría implicar una moderación en la suba de los precios del fluido.
De cualquier modo, el panorama implica un nuevo foco de conflicto para los países en desarrollo, en el marco de una economía global en reestructuración.
* Politólogo, editor de Política de NA
Los comentarios están cerrados.