Renunció Javier Iguacel. Asume Gustavo Lopetegui

El renunciante había asumido en junio en reemplazo de Juan José Aranguren. Su gestión estuvo marcada por los sucesivos aumentos en la luz, el gas y los combustibles. Cargó así con el costo político de anticipar que a partir de febrero la boleta de luz aumentará un 55% el año próximo, mientras que el gas subirá un 35% el año que viene.

Antes de renunciar, Iguacel anunció los nuevos aumentos en las tarifas de luz y de gas para el año que viene.

El ahora ex funcionario que ocupó el lugar que dejó vacante el polémico Juan José Aranguren allá por junio de este año, solo permaneció en su cargo por 190 días.

Javier Iguacel provenía de la Dirección de Vialidad Nacional.

A las pocas semanas de asumir como titular de la cartera energética se colocó al frente de los anuncios de aumentos en las tarifas de luz. En agosto de este año, el por entonces ministro de Energía dio a conocer subas en las tarifas de luz de 28% en las boletas de los usuarios del área metropolitana de Ciudad y alrededores.

Sin embargo, su gestión estuvo marcada por las tarifas del gas. A principios de octubre, el Gobierno anunció que los usuarios deberían pagar una compensación a las empresas gasíferas por efecto de la devaluación. Egresado de la carrera de Ingeniería en petróleo, tiene formación en el área energética en la que mostró desempeñarse con conocimientos suficientes en la materia.

A diferencia de su antecesor, fue durante su corta gestión un entusiasta y convencido impulsor del GNC, GNL y los Biocombustibles. También tuvo opiniones críticas hacia la política de precios de las refinadoras a las que atribuyó en más de una oportunidad fijar precios más elevados de los que correspondían. En una reunión de la que participó El Estacionero, explicó que era un error tomar como referencia para los precios la paridad de importación o import parity ya que nuestro país no es un importador neto; por el contrario opinaba que la referencia debería ser a paridad de exportación o export parity menos retenciones, lo que daba un importe más bajo.

Esto le ganó diferencias con las petroleras, las que se agudizaron, cuando anunció que establecería los precios sugeridos o de referencia a los que deberían venderse los combustibles, a fin de que los consumidores los compararan con los efectivamente cobrados en pico de surtidor, iniciativa que finalmente fue dejada de lado.

Desde su llegada a la gestión energética los combustibles subieron más de un 40%.

Dió un paso en falso al anunciar el plan, que se conoció como “Ahora 24”, que obligaba a los clientes de gas a abonar un pago extra a las gasíferas. La medida derivó en diferencias en el seno del gobierno, triunfando la opinión adversa al pago, lo que llevó al ejecutivo a emitir un bono a dos años para compensar a las empresas para dar marcha atrás con la idea de trasladar a los usuarios la compensación.

En Hacienda le endilgaban a Iguacel escaso poder de negociación con las petroleras para la determinación de precios tras la baja del crudo. Y el funcionario se defendía sosteniendo que no estaba apañando a las empresas, sino que estas estaban cartelizadas.

La acusación del secretario de Energía contra las petroleras terminó en agosto en un llamado de los presidentes de YPF, Miguel Ángel Gutiérrez; de Shell, Teófilo Lacroze, y de Axion, Marcos Bulgheroni, a Macri para que su funcionario clarificara la situación.

El Presidente le encomendó a Lopetegui que oficiara de mediador. Finalmente, los combustibles bajaron tres por ciento en noviembre.

Otro motivo de reproches fue que no trajo ni un solo dólar de inversión de su gira por Estados Unidos, adonde viajó para “vender” Vaca Muerta.

El que llega

Gustavo Lopetegui, reemplazante de Javier Iguacel como secretario de Energía, se desempeñó en el inicio del gobierno de Cambiemos en la vice jefatura de gabinete, como Secretario de Coordinación de Políticas Públicas, pero luego del último cambio de gabinete había quedado solo como asesor presidencial. Ahora vuelve a los primeros planos en un área conflictiva donde Iguacel duró apenas un semestre.

Lopetegui es contador público, licenciado en Administración de Empresas de la Universidad Argentina de la Empresa y realizó una maestría en Dirección de Empresas en la Universidad de Navarra. En 2004 fue ministro de la Producción bonaerense bajo la gestión de Felipe Solá y también ocupó la presidencia del Banco Provincia. Junto a Mario Quintana creó la cadena de supermercados Eki y desde 2013 participa en la Fundación Pensar, núcleo duro del macrismo. Creó la empresa láctea Pampa Cheese y trabajó en la consultora McKinsey en España, Estados Unidos, Brasil y Argentina.

Apenas antes del comienzo del gobierno de Cambiemos, Lopetegui dejó su cargo como CEO de LAN Argentina, que desempeñó desde 2009.

Hombre de confianza del jefe de Gabinete Marcos Peña, el nuevo Secretario no tiene formación específica en el área de la energía.

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