Naftas: la llegada de los precios patagónicos a Pedro Luro encendió el alerta en Bahía Blanca

Empresarios del sector del combustible de Bahía Blanca calificaron como “peligrosísima” la decisión de dos compañías petroleras de rebajar hasta 11 pesos el valor final de las naftas que se expenden en Pedro Luro -en la zona sur de Villarino- para poder competir con las estaciones de servicio ubicadas en la región patagónica.

“Claramente es una grave amenaza para el resto de las estaciones de servicio de la región”, señaló Favio Rodríguez, presidente de la Cámara de Estacioneros de Bahía Blanca.

La medida se tomó hace unos 10 días, luego de que Axion abrió una estación dos kilómetros al sur del río Colorado y con todos los beneficios impositivos que tiene la Patagonia.

Para evitar el posible quiebre de sus estaciones en Pedro Luro -ubicadas a 3 mil metros de allí, pero ya fuera de la zona patagónica-, tanto Shell como YPF decidieron absorber pérdidas y rebajar el precio de sus naftas más de un 20% en esa localidad.

Como resultado, a unos 120 kilómetros de Bahía Blanca hoy es posibles comprar nafta súper a 31,95 pesos el litro, o premium por 36,23 pesos. En la ciudad, en tanto, los valores no bajan de 40,73 y 46,62, respectivamente.

 

La situación incluso podría empeorar si Petrobrás sigue los mismos pasos que sus rivales, ya que esa firma tiene puntos de expendio en Mayor Buratovich, a menos de 100 kilómetros de Bahía Blanca.

“Tener cada vez más cerca estos precios va a provocar no sólo una mayor caída en las ventas de combustibles líquidos en Bahía; quizá también le pegue muy fuerte al mercado de GNC. Donde hay nafta barata no hay GNC”, alertó Rodríguez.

El empresario dijo que ya han trasladado el reclamo en forma verbal a las compañías, ya que la decisión de vender combustible barato en Pedro Luro fue de ellas.

“De todas formas, la solución de fondo a todo este gran problema de distorsión de precios es que los beneficios para la zona sur se apliquen realmente en el sur. Es el colmo que al norte de La Pampa, casi al límite con Córdoba, tengan precios patagónicos y en lugares como Bahía Blanca la nafta premium cueste 10 pesos más”, se quejó.

Rodríguez recordó que hoy, tanto si se circula al norte por la ruta 35, como al sur por la 3, se puede cargar combustible a precios patagónicos a menos de 130 kilómetros de Bahía.

“Con la autonomía que hoy tienen los tanques, un tipo carga en el sur y llega a Buenos Aires. Ni frena en Bahía. Yo tengo estaciones de servicio en la ruta 3, y es frecuente que lleguen clientes a cargar lo justo para llegar a Río Colorado y pagar 10 o 12 pesos menos el litro”, lamentó.

También aseguró que las distorsiones de precios propician el tráfico y la venta ilegal de combustible.

“En tres años, a partir de la ley 27.209, La Pampa triplicó su consumo de combustible. ¿Qué hay que pensar? ¿Que triplicaron la actividad económica en esa provincia? No, la realidad es que está lleno de gente que pasa combustible de un lado a otro, ya sea en bidones, chanchitas o carros. Es una locura”, subrayó.

Pasos a seguir

Rodríguez señaló que la Cámara de Estacioneros está en contacto con las petroleras para resolver la situación, con la perspectiva de volver a retomar las gestiones con funcionarios políticos y legisladores en 2019.

“Hay estaciones de servicio de Bahía que siguen trabajando bien con camiones, pero otras que directamente ya perdieron a esos clientes. No puede ser así. La estaciones de servicio tienen una necesidad permanente de inversión, y con esta situación no podés hacer nada”, subrayó.

“Hoy el contexto macroeconómico está alterado, y por eso queremos que se aquieten las aguas para volver a la carga con nuestro planteo. Hay que plantear nuestra situación e ir con la verdad. Esta ley nació en una época en que había que hacer una fuerte promoción industrial de la Patagonia, pero hoy los mejores salarios del país están en el sur”, añadió.

“Esta ley altera todo. No sólo las ventas, sino las inversiones. Hasta las empresas de transporte se quieren ir a hacer base en otras ciudades, para tener depósitos de estibaje”, completó.

Una ley distorsiva

La distorsión de los precios de los combustibles es provocada por la ley 27.209, aprobada y promulgada durante los últimos días del gobierno de Cristina Fernández de Kirchner, en noviembre de 2015.

Mediante esta ley se eximió del Impuesto a la Transferencia de Combustibles (ITC) a todas las estaciones de servicio del territorio patagónico.

Hasta ese momento las únicas beneficiadas eran las provincias de Chubut, Santa Cruz y Tierra del Fuego, pero con la ley la medida se extendió a La Pampa, Neuquén, Río Negro, el departamento mendocino de Malargüe y el distrito bonaerense de Patagones.

El resultado fue una notable caída del precio de los combustibles, lo que provocó que miles de conductores dejaran de cargar en sus localidades y empezaran a viajar hacia la zona beneficiada en busca de mejores precios.

La consecuencia es obvia: mientras algunas estaciones patagónicas triplicaron su expendio en los últimos tres años, en sitios de nuestra región como Rivera, Villa Iris, Darregueira y Pedro Luro -los más cercanos al límite con la Patagonia- las ventas cayeron no menos del 40% al 50%

Fuente: La Nueva