Los precios de los combustibles continuarían congelados (de hecho), hasta marzo

El año 2019 no fue un buen año para las estaciones de servicio. La rentabilidad venía disminuyendo desde tiempo atrás lo  que preocupaba a los estacioneros de todo el país. Pese a que se decía que los precios habían llegado a un punto de equilibrio, eso refería seguramente a las reinadoras pero no a las estaciones de servicio, que imposibilitadas de obtener un incremento en los márgenes porcentuales de comercialización, solo podían esperar una actualización de los precios de venta. Los costos habían crecido más que los ingresos; pero la realidad fue otra: el año terminó con una inflación del 53,8% mientras que los precios de los  combustibles se incrementaron un 42,9%  ¡10.9 puntos porcentuales menos!.

En aquel momento había preocupación entre los estacioneros por la situación y se esperaba alguna solución  al problema por  parte de sus proveedoras o del gobierno.

Si en aquél momento alguien les hubiera dicho que dos años después estarían endeudados y con ingresos congelados durante 7 meses y medio mientras la inflación (los costos de la estación de servicio), crecían un 35%, seguramente no lo hubieran creído. Pero eso es exactamente lo que ocurrió.

Hasta ayer se creía que ese sería el triste final de la historia, pero no; las cosas siempre pueden ser peor.

Según publicó el diario Ámbito, con la intención de no afectar la temporada turística el Gobierno decidió no aumentar el precio de los combustibles en principio hasta marzo. Malestar en el sector privado.

“No está previsto que YPF aumente los precios de las naftas en los próximos meses”, anticiparon a Ámbito fuentes de la Casa Rosada. La intención del Gobierno –explicaron– es favorecer el turismo durante el verano, de donde recién en marzo podrían evaluarse nuevos ajustes.

Sin embargo, las fuentes oficiales consultadas señalan que, por el momento, no son necesarios ajustes para cumplir con los planes de YPF.

Agregan que la estabilidad en los precios de los combustibles apuntará a un doble propósito. Por un lado, como se señaló, facilitar el turismo apuntalando, de esta forma, la recuperación que viene registrando la economía.

Por otra parte, se señala que al ser los combustibles un costo que impacta globalmente a los precios de la economía, la estabilidad en los valores ayudará a la desaceleración de la inflación.

Obviamente, nadie se refirió a las estaciones de servicio