Se estableció una suerte de “clearing” de auditorías para asistir a las estaciones de servicio

El Artículo 6º del Decreto N° 297/20 dispuso en su momento que quedaban exceptuadas del cumplimiento del “aislamiento social, preventivo y obligatorio” y de la prohibición de circular, las personas afectadas a las actividades y servicios declarados esenciales en la emergencia, como ser estaciones expendedoras de combustibles. Sin embargo las Empresas Auditoras de Seguridad y Universidades Nacionales encargadas de llevar a cabo las diversas auditorías y certificaciones exigidas por la Secretaría de Energía no se encontraban contempladas dentro del listado de actividades y servicios declarados esenciales, por lo que el incumplimiento de la acreditación de auditorías y/o certificados de seguridad podía  acarrear la baja en los registros y el consecuente cese de actividades.

Por tal motivo la resolución 63/2020 de la Secretaría de Energía dispuso la ampliación del plazo para la acreditación de las auditorías y certificados de seguridad, con vencimiento desde el 17 de marzo de 2020 y hasta que dichas actividades sean incorporadas al listado de actividades y servicios declarados esenciales, por el término de 60 días corridos desde que tal declaración tenga lugar.

Para conocer más acerca de esta cuestión, elestacionero.com dialogó con el Ing. Héctor Bustos, titular de la auditora de seguridad HSE S.A.

¿Cómo está actualmente la situación en su actividad?

Está durísimo porque no te dejan entrar a las provincias, cada una tiene su reglamentación y es lógico y atendible lo que cada una establece; obviamente si no tienen muchos enfermos en su territorio no van a dejar entrar a gente de otros lugares que puedan estar contagiados.

La excepción que se estableció para las estaciones de servicio que tenían su auditoría vencida, termino a los 60 días, cuando las auditoras fueron autorizadas para trabajar, aunque subsistieron las restricciones para el ingreso de nuestra gente, lo que tornó en muchos casos impracticable el permiso de trabajo que tenemos.

¿Y cómo se las arreglan?

Actualmente estamos complementándonos entre las distintas empresas auditoras; cuando alguna logra entrar a una provincia complicada, las otras le pasan los pedidos que tienen en ese lugar y que no pueden atender por los problemas de movilidad mencionados. A la vez cuando nosotros logramos entrar a otro lugar, las otras empresas nos pasan los pedidos de sus clientes. Así vamos complementándonos entre todos los colegas para atender las solicitudes de nuestros clientes.

¿Y qué pasa con las estaciones de servicio que tienen la auditoría vencida?

Lamentablemente las estaciones de servicio que tienen que realizar la auditoría y no cuentan con una empresa que pueda hacerla, quedan en situación complicada; diríamos que dependen de la petrolera que quiera seguir abasteciéndolos  a pesar de que no figuren en la lista de bocas autorizadas de la Resolución 1102.

¿Y si tienen que renovar la habilitación municipal?

Eso está todo postergado, incluso la renovación de los carnets de conductor.

Me imagino la situación de un estacionero que tenga un problema de seguridad o de contaminación y estando obligado a hacer la auditoría no haya podido hacerla por estos problemas que mencionabas

El tema es muy complicado, Nosotros en algunos lugares hemos tenido que entrar acompañados por la policía hasta la estación de servicio, desalojarla totalmente hasta que nuestra gente terminaba de trabajar y luego acompañada de nuevo por la policía hasta salir del pueblo.

Tuvimos un colega que logró entrar a Tierra del Fuego y nosotros le dimos una auditoría que nos habían solicitado para que la hicieran ellos. Está el caso por ejemplo de Tartagal; para llegar allí hay que pasar por Salta y Jujuy; se puede pasar pero hay que hacer siete días de cuarentena en Salta y otros siete días en Jujuy; no se puede…

Esto nos genera un problema económico y también con nuestros clientes de muchos años a los que no podemos atender como quisiéramos.

Actualmente hay muchos trámites que pueden hacerse en forma virtual, pero no es lo mismo que de la manera tradicional; la documentación presentada vía mail no es tan fácilmente verificable en su autenticidad como lo es en papel; se presta a engaños.